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Elección del color y forma de los dientes

Desde hace años, en la Clinica me piden que colabore ocasionalmente en el asesoramiento del montaje, forma, tamaño y color de los dientes en las prótesis completas o implantosoportadas, principalmente cuando el paciente es una mujer.

Un punto de vista estrictamente clínico y científico sugiere medidas que se relacionan entre sí, como es la proporción de altura de la frente con la longitud de la nariz, la altura desde ésta hasta el mentón, etc. De todos es sabido que el adecuado soporte de los labios depende de la posición de los dientes en la boca. Según la forma de la boca, los labios serán más o menos prominentes o hundidos. Hay muchos conceptos que los profesionales de la Odontología manejan, y desde luego, no es por ello que me piden colaborar…

La prueba de dientes
La prueba de dientes

… lo solicitan porque hay algo del orden de la intuición rápida, la visión intuitiva y sintetizadora, más propia del hemisferio cerebral derecho, que se hace necesaria en un trabajo de exigencia estética. En las pruebas de dientes, éstos se colocan a la altura vertical adecuada, buscando que el labio superior este bien apoyado, que la línea media no quede desviada, que el plano oclusal esté recto etc. Pero luego, de un vistazo, se percibe si el resultado obtenido en la prueba «le sienta bien o no» a la paciente. Son percepciones que ve el ojo humano en una fracción de segundo, una percepción semejante a la que tenemos cuando, de lejos y entre una multitud, reconocemos una determinada persona, sólo por el modo peculiar de moverse. Para eso me llaman, para que, mediante una «percepción estética» directa, más allá de los parámetros geométricos del montaje de dientes, pueda detectar posibilidades de mejora en el rostro de la paciente, durante las pruebas de la prótesis dental.

Cuando una mujer se anima a cambiar una prótesis dental, empieza en su cerebro a proyectar una  imagen de lo que desea conseguir con el cambio, y en el diálogo con el profesional, le dice o debería decirle, cómo le gustaría que le quedaran los dientes. A veces al profesional le cuesta interpretar esa imagen mental que la paciente ya tiene internamente proyectada. Lo mas fácil suele ser el color, pues pocas pacientes quieren tener unos dientes oscuros. Lo mas difícil suele ser la forma, el tamaño y la posición que van a tener los dientes en la arcada. Mientras que unas pacientes los quieren muy regulares y perfectos, es decir, colocados muy rectos; otras los quieren con alguna característica peculiar que les identifique. Algún diente ligeramente montado o alguna irregularidad, incluso anomalía, que les haga sentirse reconocibles, como por ejemplo, ligeras inclinaciones o giroversiones, desviación de la línea media, un diastema intercentral superior, etc.

 

La prótesis única que realza esta sonrisa.
La prótesis única que realza esta sonrisa.

Este trabajo de desvelamiento del deseo de la paciente con respecto a sus dientes me entusiasma. Percibo su intención de no tener todos los dientes “igualitos”, deseando sentir que sigue siendo ella misma. En esto me ayuda sobremanera que la paciente aporte una foto, de la época que sea, en la que aparezca sonriendo ampliamente. Con ella por un lado y con los catalogos de los laboratorios por otro, elegimos, siguiendo medidas de precisión, los dientes que vamos a colocar en la prótesis, cuando ésta es de resina o acrílico. Cuando se trata de porcelana, cada pieza es elaborada manualmente y los catálogos sólo sirven de mera referencia general, por lo que lo ideal sería la intervención de la “esteticista dental”. Para aproximarse al resultado deseado, se suele proceder con diseños de encerado previo y el margen de error, en el traslado a la boca y a la cara de la paciente de este encerado previo, es muy grande. Nuevamente, la fotografía de la paciente nos permitirá apreciar la singularidad de la sonrisa de cada rostro. Aunque los patrones dentales se derivan de estudios estadísticos, estas clasificaciones «de talante científico» no suelen ser suficientes, pues cada sonrisa es única. Esto es lo que queremos conseguir: preservar este singularidad en el rostro femenino.

Prueba con el resultado singular deseado.
Prueba con el resultado singular deseado.

Una rehabilitación estética de esta envergadura, resulta para el profesional un reto estimulante, y para la paciente, la tranquilidad y el alivio de sentirse reconocida como única y no como un número de consulta, un elemento de una cadena de montaje, un trabajo para un montaje de dientes estándar más. Los ordenadores son capaces de calcular las proporciones de la cara y, mediante algoritmos bien programados, nos pueden dar indicaciones acerca de los dientes que supuestamente serían los óptimos para un caso concreto. Yo, como psicóloga de la Clinica Dental Esteve, prefiero tener la experiencia de comunicación humana junto con la paciente y el dentista, dilucidando e iluminando entre los tres “esa cualidad única” que caracteriza a cada paciente, esa cualidad que los dientes de su sonrisa en su cara deben mostrar y evidenciar.

Esa caracterización es especial, "artística".
Esa caracterización es especial, «artística».

Cada uno de nosotros somos únicos y singulares y ello se manifiesta, como no podía ser de otro modo, también en nuestros dientes. Interpretarlo y acertar con la solución estética es uno de los aspectos más artísticos de nuestro trabajo.

Escribe un comentario más abajo para resolver tus dudas acerca del color, tamaño y forma de los dientes. Intentaremos resolvértela de una manera transparente y comprensible.

 

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